No llores porque terminó...
La vida es CAMBIO.
Inicio y final van de la mano.
y entre ellos solo hay tiempo:
a veces largo y confuso
otras corto e intenso.
Un inquietante tiempo
que te invita a estar presente,
a ser humilde, a ser paciente,
ya que ante él no hay más poder
que el de VIVIR CONSCIENTE.
El duelo duele y también libera:
te invita a soltar apegos,
te despoja de tus anhelos,
te desnuda de expectativas,
te revela tus sentimientos.
El duelo duele y también transforma
si despliegas tus alas y te lanzas sin miedo:
a escuchar la tristeza,
a observar tu vacío
y acariciar su silencio.
El duelo duele,
despierta tu juez interno
te reprocha lo no lo que hiciste,
te muestra “el sufrimiento”:
un llanto interno que surge
de no aceptar el momento,
El dolor duele, pero transforma,
añade valor al tiempo.
Quizás por eso la vida,
en su infinita sabiduría,
solo al AMOR hizo eterno.
-----------------
Autor, Rebeca Pabon. Psicóloga, Coach y Terapeuta
www.rebecapabon.es
------------------
Como decía el gran GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ,
no llores porque terminó,
sonríe porque sucedió
Cuando algo acaba:
una etapa, una relación, un trabajo, una vida,
iniciamos un proceso de adaptación llamado duelo.
Se mueven nuestros cimientos emocionales y
ante la resistencia al cambio,
aparecen la negación, la rabia, la tristeza y el miedo...
Son emociones transformadoras,
pero nos asustan, porque no nos enseñaron a comprenderlas ni gestionarlas,
con lo cual, ante un duelo, solemos sentirnos solos y en tierra de nadie:
con inquietud presente,
con miedo al futuro,
vulnerables y sin recursos.
No es un escenario demasiado alentador,
pero nos empuja a una metamorfosis interna y constante que,
con el tiempo,
nos muestra,
si nos abrimos a su experiencia,
que podemos CONFIAR EN LA VIDA,
que podemos abrirnos al cambio que constantemente nos acecha, recordándonos la importancia de cuidar cada momento
ya que nada en la vida es eterno.
Autor, Rebeca Pabon. Psicóloga, Coach y Terapeuta
www.rebecapabon.es
Tags: